He realizado un ejercicio de planificación natural con todas sus fases. He visualizado el éxito del asunto y después de la lluvia de ideas, diseñé un menú, escribí una lista de la compra exhaustiva, hice la compra (@errand), y ocupé la cocina con todos los ingredientes a la vista. Encendí fuegos y horno, y en dos horas estaba lista. Quince personas. Sin entrar en la calidad del cocinero, que no es aquí momento de reseñarla, todo fue razonablemente bien, en tiempos, cocciones y temperaturas. Incluye cafés, copas y destilados.
Mis amigos y amigas me han felicitado (son amigos) por la cocina. A alguno le he dicho la verdad, la culpa es de GTD.